En el mundo moderno la apariencia personal es nuestra mejor carta de presentación, y uno de los elementos que forman parte de este sistema es sin lugar a duda nuestra cabellera. En este sentido, lucir un cabello abundante, cuidado y saludable dice mucho de quienes somos, y es por esta razón que muchas personas se preocupan por esta área en particular de sus cuerpos.
¿Qué es el cabello?
El cabello es una estructura epidérmica formada por fibra de queratina que se proyecta de manera oblicua hacia el exterior de la piel. Está conformado por una raíz y un tallo que nacen de un folículo piloso ubicado en el cuero cabelludo, y tiene la capacidad de crecer gracias a ciertos elementos suministrados por los vasos sanguíneos.
La función principal del cabello es proteger la cabeza de los agentes externos, como el sol, la lluvia, el viento o los insectos, sin embargo, también cumple un rol social, ya que influye de forma directa en nuestra imagen y apariencia personal.
Por otra parte, un elemento que vale la pena destacar es la cantidad de cabello que posee una persona; en este aspecto existen algunas divergencias ya que no existe un número preciso.
En general, esta cifra varía de acuerdo a múltiples factores, tales como la edad, el sexo, las condiciones de salud y el color del cabello, sin embargo podemos afirmar que en promedio una persona posee entre 100.000 y 150.000 cabellos en la cabeza.
El ciclo de vida del cabello
Aunque parezca mentira, el ser humano pierde en promedio entre 50 y 100 cabellos al día; esto pareciera una cifra elevada, pero en realidad no lo es, ya que forma parte del ciclo de vida natural de esta estructura.
En términos generales, podemos subdividir este proceso en cuatro fases o ciclos:
- Fase Anágena
- Fase Catágena
- Fase Telógena
- Fase Exógena
Cada una de estas etapas están bien definidas y poseen un tiempo específico en el cual se desarrollan, sin embargo, algunos factores como la alimentación, el cuidado personal, la salud o el medio ambiente, pueden causar trastornos en alguna de las fases. Esto nos da a entender que podemos tomar algunas acciones para garantizar el normal desarrollo del cabello en cada uno de sus ciclos.
Afortunadamente, cada folículo piloso tiene su propio ciclo, es decir que no están sincronizados, de esta forma, mientras algunos cabellos están naciendo, otros se encuentran en pleno desarrollo o en su etapa de caída; si esto no fuese así, tendríamos un periodo de tiempo con la cabeza calva.
- Fase Anágena
También es denominada fase de crecimiento, y representa el ciclo más largo en la vida del cabello, ya que puede durar de 2 a 5 años, y en algunos casos se puede extender hasta los 7 años. Durante la etapa anágena la raíz del cabello, o bulbo piloso, se regenera produciendo un nuevo cabello, el cual crecerá a un ritmo promedio de 1 cm cada mes.
En esta fase el folículo piloso permanece en un proceso continuo de expulsión del cabello, que solo es detenido cuando finaliza su ciclo de vida. Como dato adicional, podemos afirmar que en cualquier momento cerca de un 90% de todos los cabellos de la cabeza se encuentran en la fase anágena.
- Fase Catágena
A la fase catágena también se le conoce como fase de transición y en ella ocurre la retracción del folículo pilos de la superficie del cuero cabelludo, trayendo como consecuencia la disminución de la producción de la fibra capilar. Este proceso puede durar de 2 a 3 semanas y durante el mismo el cabello se separa de la zona inferir del folículo y deja de crecer. Se estima que en cualquier momento cerca de un 5% de todo el cabello se encuentra en la fase catágena.
- Fase Telógena
A esta fase también se le llama fase de reposo o descanso, y por lo general dura unos 3 meses. Durante la etapa telógena, el cabello deja de crecer definitivamente pero se mantiene adherido al cuero cabelludo mientras en el folículo comienza a crecer un nuevo cabello. Es importante mencionar que en cualquier momento cerca de un 10% de todo el cabello se encuentra en esta etapa.
- Fase Exogena
Esta última fase es la muda o caída del cabello en sí. Algunos científicos la consideran como una extensión de la fase telógena, sin embargo, existen algunas discrepancias en el mundo dermatológico con respecto a mantener unida las fases 3 y 4 como un solo ciclo.
Lo cierto es que después de un tiempo estimado de 2 a 7 años el cabello finalmente se cae y es sustituido inmediatamente por uno nuevo. En este sentido, cada uno de los folículos pilosos puede producir en promedio de 25 a 30 cabellos durante toda nuestra vida.
¿Cómo mantener la salud del cabello?
Para tener un cabello saludable debe existir la conjunción de varios elementos, en primer lugar hay un factor genético que debemos considerar, por otro lado, esta las condiciones generales de salud, los niveles hormonales, el estilo de vida, la alimentación, el nivel de estrés, así como la higiene y el cuidado personal.
La alimentación
Hay un refrán popular que dice “somos lo que comemos”, y en muchos sentidos esto es verdad; por ello, resulta indispensable contar con una adecuada nutrición que nos permita alimentar a nuestro organismo con las proteínas, las vitaminas y los minerales adecuados para su óptimo desarrollo.
El cabello está constituido principalmente de queratina, que básicamente es una proteína fibrosa, así como de lípidos, oligoelementos y agua. Debido a esto, es fundamental mantener una alimentación alta en proteínas para ayudar al crecimiento saludable del cabello.
Entre las mejores proteínas que podemos consumir se encuentran las carnes magras, el pescado, los frijoles, los productos lácteos bajos en grasa y las legumbres. Por otra parte, también es muy conveniente incluir frutas y vegetales que contenga una elevada concentración de vitamina D, C, hierro, zinc, ácido fólico y vitamina B12.
Control del estrés
Está demostrado que los altos niveles de estrés o preocupación en nuestra vida contribuyen a la aparición de diversas enfermedades y también a la caída del cabello. Por esta razón, resulta conveniente controlar este factor desencadenante, a través de la práctica de diversas técnicas que coadyuvan a disminuir la ansiedad y la preocupación.
El estrés puede ser causado por múltiples factores, de esta forma cada persona tendrá que abordar este problema de acuerdo a sus condiciones particulares. Sin embargo, existen algunas acciones, que en general, pueden ayudarnos a controlar el estrés, como por ejemplo, las técnicas de respiración, el ejercicio físico, la practicas del yoga, la acupuntura, la aroma terapia, los masajes, el deporte, la música, el baile, la interacción con la naturaleza, entre muchas otras cosas.
Higiene y cuidado del cabello
La higiene es otro factor que determina la longevidad del cabello, en este sentido, la selección y el uso adecuado del champú, así como de un buen acondicionador, contribuyen de forma fehaciente a la salud de la cabellera. Al respecto, es importante que sepamos elegir el mejor producto que se adapte a las necesidades en particular de nuestro cabello.
En este sentido, en el mercado podemos conseguir champú, enjuague y acondicionador de múltiples marcas, que han sido diseñados para diferentes tipos de cabello, ya sea seco, graso, fino, grueso, teñido, entre otros.
Finalmente, otro elemento que debemos considerar es el trato suave del cabello, esto quiere decir, que mientras lo estemos lavando, secando o peinando tenemos que hacerlo con suavidad sin maltratarlo con fuertes movimientos. Además de esto evitemos el uso de agua muy caliente, así como de secadores eléctrico con altas temperaturas, ya que estos tienden a dañar considerablemente la estructura del cabello.
Concejos para prevenir la caída prematura del cabello
Como ya mencionamos cada día de nuestras vidas se nos caen entre 50 y 100 cabellos de forma natural, sin embargo, si notamos una caída excesiva del mismo, debemos consultar inmediatamente con un profesional de la salud y tomar algunas acciones que prevengan o disminuyan este proceso.
A continuación te daremos algunos tips o recomendaciones para prevenir la caída prematura del cabello:
- No se peine el cabello con fuerza, ya que en algunos casos los folículos pilosos se encuentran debilitados y al halar con fuerza el cabello tenderá a desprenderse.
- Utilice champú y acondicionador que posean productos para revitalizar el cuero cabelludo, así como para reparar y fortalecer el cabello desde la raíz hasta las puntas.
- Tenga una dieta balanceada, procure ingerir alimentos que nutran su cuerpo en general. Incluya dentro de su dieta, proteínas, frutas, vegetales, legumbres, frutos secos y cereales.
- Ingiera complementos multivitamínicos, en especial aquellos que contengan vitamina C, vitamina D, vitamina B6, biotina, hierro y zinc.
- Evite lavarse el cabello con mucha frecuencia, y cuando deba hacerlo, hágalo suavemente.
- Cuando se esté secando el cabello no aplique mucha fuerza y utilice un paño especial que absorba el agua con rapidez, ya que el exceso de humedad tiende a deteriorar aún más al cabello.
- Minimice en la medida de lo posible el uso de secadoras, rizadoras y planchas calientes, así como también, el tiente para cabello.
- Si tiene el cabello largo, trate de no usar colas o ligas para sujetarlo, ya que al estar mucho tiempo en tensión puede llegar a caerse.
- Reduzca el estrés, haga ejercicio, distráigase, ría y disfrute de la vida.
Recuerde que estos son solo algunos concejos para prevenir la caída excesiva del cabello, en todo caso, si este proceso es muy pronunciado lo mejor es acudir a un dermatólogo especializado para que pueda ayudarlo a diagnosticar de forma correcta el problema y a encontrar una posible solución al mismo.